Crece el hartazgo de la Fórmula 1 con la FIA


    Las funciones de la FIA y la Fórmula 1 se solapan tanto que en ocasiones incluso a la prensa especializada cuesta explicar dónde empiezan y dónde terminan las atribuciones de cada uno, quién tiene culpa de qué o quién lucha por qué.

    Fórmula 1 vs FIA

    Básicamente, la Fórmula 1 es una categoría privada del motor propiedad de Liberty Media, a quién pertenecen los derechos de explotación de la misma. La FIA es el órgano rector del automovilismo, una Federación que se atribuye competencias y responsabilidades.

    Desde hace muchos años, la FIA ha intentado hacerse grande dentro de la Fórmula 1, algo a lo que Bernie Ecclestone, siempre con una intención detrás, ha ido accediendo. Esa es la razón de que los reglamentos, es decir, las características del auto con el que se compite, las decide la FIA. Teóricamente consensuado con la Fórmula 1, pero decisión al fin y al cabo de esta Federación.

    Esto provoca escenarios tan curiosos como ver a Bernie Ecclestone quejándose de los motores de la Fórmula 1 cuando se estrenó la era híbrida, es decir, quejándose de su competición.

    Cuando Liberty Media adquirió la Fórmula 1, se sorprendió de muchos de los procedimientos que dependían directamente de la FIA y de los que ellos carecían de autoridad. Es el funcionamiento que había, y tocaba tragar.

    Con el paso de los años, las tiranteces entre ambas partes han ido creciendo. No es menos cierto que Liberty Media siente cierta tranquilidad con le existencia de la FIA, ya que no deja de ser ente al que pueden culpar de según qué cosas. De la misma manera, no consiguen entender la necesidad de que prácticamente lo tengan que autorizar todo.

    Liberty Media inició un cambio de tendencia después de las muchas trabas que la FIA puso para la inclusión en el calendario del Gran Premio de Las Vegas, que quedaba siempre supeditado a las decisiones de la Federación. ¿Por qué yo, dueño del campeonato, necesito el permiso de la FIA para celebrar una carrera en Las Vegas?, se preguntaban en Liberty.

    Ahí comenzaron a deslizarse filtraciones que hablaban del descontento generalizado de Liberty Media que aparentemente venía de lejos y no solo por lo ocurrido en el calendario, sino por cosas como la del Gran Premio de Spa. A ojos de la Liberty Media, la FIA toma decisiones que dañan la imagen y el valor de su empresa, mientras que la Federación no depende de lo bien o mal que le vaya a la Fórmula 1 para asegurar su actividad.

    El pasado fin de semana, en el Gran Premio de Singapur, volvieron a aflorar todos los fantasmas del conflicto entre Liberty Media y la FIA. Los de la Fórmula 1 entienden que se birló una oportunidad maravillosa de una carrera en agua, de las que tanto adoran los aficionados, retrasando el inicio de la salida hasta el punto de que el neumático de lluvia extrema, fue meramente testimonial.

    Decisiones dañinas para la Fórmula 1

    Por si fuera poco, la carrera terminó con una investigación pendiente sobre el ganador de la misma. Se celebró un podio que podía o no ser real, y las televisiones finalizaron sus retransmisiones sin saber si Sergio Pérez era legítimo ganador del Gran Premio, dejando al aficionado desamparado, esperando a la decisión de la FIA para una cuestión bastante sencilla abordar y que se debería haber hecho dentro de la propia carrera, no más de dos horas después de que finalizara la misma. Tampoco olvidan la pobre resolución del Gran Premio de Italia.

    A Liberty media le saca de quicio lo poco que a la FIA le importan estos detalles, el cuidado al aficionado y al show que ellos tratan de potenciar por todos los medios, y el hartazgo se ha hecho patente, con una novedad respecto a lo acontecido tras el Gran Premio de Spa-Francorchamps.

    Y es que Liberty Media ya no se ha conformado con filtrar su descontento, sino que ha puesto a sus más que conocidos voceros, sospechosos habituales a nómina de la Fórmula 1, escondidos bajo el papel de periodistas, a hacer justo lo que hasta ahora tenían vetado; criticar la actuación de la FIA y afirmar que no puede volver a ocurrir.

    ¿Puede la F1 prescindir de la FIA?

    Sí, una Fórmula 1 sin la FIA es complicada, pero no imposible. Realmente, a ninguna de las dos partes les conviene, pero Liberty Media quiere dar un toque de atención y claramente decirle a la FIA que debe dejar de vivir en la comodidad de su monopolio y empezar a pensar también en el modelo de negocio al que decisiones como las de este fin de semana, resultan tremendamente dañinas.

    Fuente: www.caranddriver.com

    Leave a Reply

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *